El reto de este proyecto, proyectar un edificio de 600m2 sin, aparentemente, ninguna base sobre la que apoyarse.  El planteamiento será el de cómo formalizar un edificio de tales dimensiones basándote en un entorno formalizado a partir de una transformación contínua. La respuesta estará en el elemento que configura tanto el espacio como dicha transformación: los containers. Un edificio transformable para un entorno volátil. Actualmente no hay empresa, no hay containers, no habría edificio.
PLANTA BAJA
Back to Top